Emplazado en lo alto de una colina, el castillo domina la aldea y el puente que cruza el río Duero. San Esteban de Gormaz surgió como plaza fortificada por su estratégica importancia en la línea defensiva del Duero, siglo X, siendo campo de numerosas batallas.
Castillo en origen musulmán, de base alargada y estrecha, fue reformado por los cristianos posteriormente. La construcción se realizó con sillares labrados, seguramente de procedencia romana. Subsiste un lienzo de muralla levantado a plomo sobre un acantilado vertical rocoso e imposible de trepar. En su interior aún se pueden observar restos de estancias, aljibes y silos. A pesar de los pocos restos que permanecen tiene una importancia relevante y desde allí puede verse, a simple vista, el castillo de Gormaz.
Deja una respuesta