Iglesia construida en el último cuarto del siglo XVI gracias al patronato de los Condes de Fuensaldaña. Finalizó la obra en 1590 y supone una copia fiel de la colegiata de Villagarcía de Campos.
La planta se constituye con un rectángulo, con capillas entre los contrafuertes, y la fachada es del tipo viñolesco usado por los jesuitas: dos cuerpos, más estrecho el alto, con frontón de remate. Sobre la portada está la imagen de San Miguel, de finales del Siglo XV, y entrando en el presbiterio están las estatuas de los arcángeles San Rafael y San Gabriel de Gregorio Fernández. Deben mencionarse dos pinturas del Siglo XVI, que deben contemplarse desde un extremo, mediante lo cual pueden verse los retratos de Carlos V y de la emperatriz Isabel.
Deja una respuesta