La iglesia, de una sola nave y dos capillas, se hace presente por su monumental torre campanario del S.XVI, restaurada en 2021, con un sólido cuerpo bajo de piedra y los pisos superiores de ladrillo, aligerados con numerosos ventanales. Sobre su cúpula se apoya la estatua del Sagrado Corazón. Dentro, aparte de su bóveda de crucería sobre el presbiterio, interesa el retablo mayor renacentista, formado por múltiples escenas talladas. Fue obra del artista francés Jacques Bernard, quien lo cinceló en el año 1542, en colaboración con varios discípulos. Veinte años después lo policromaron los Carrancejas de León. Ha sido minuciosamente restaurado en el 1999. Entre todos los de su estilo, este conjunto escultórico es uno de los más valiosos y admirables de toda la provincia.
Lo más curioso es la magnífica cúpula de la cabecera, que no es en realidad de ladrillo, sino de piedra lucida con un revoco de cal y arena, sobre el que se pintaron los falsos ladrillos, un trabajo tan “minucioso y bien ejecutado” que engaña al ojo, pues a simple vista parece un enladrillado real.
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