Obra de gran sencillez y austeridad. Es de planta clásica con una única nave y crucero de brazos cortos, se cubre con bóveda de cañón y cúpula de media naranja.
La actual denominación de Lois deriva del término Loides, puede venir de la voz eusquérica `Lodi`, que significa lugar de barro. La construcción del templo se debe a tres obispos que dio el pueblo y a Don Jerónimo R. Castañón que fundó la preceptoria de Lois, llamada `Catedral de la montaña`, y el arquitecto fue Fabián Cabezas. Prácticamente todos los habitantes de Lois pertenecían a la nobleza, lo cual se refleja en el gran número de escudos que adornan las fachadas.
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